Ya estoy aquí, otra vez, ensayando una nueva despedida, aquí obligándome a dar el primer paso de mi huida. Colgada de tu melena, atada a ti por cadenas, a ti, a ti. Maldito deseo, mi voluntad envenenas llenas de ti mi existencia, de ti, por tí, no puedo creerlo. Pero eres mío, tan fuertemente mío que hasta me siento un ser injusto y egoísta pero quería decirte un hasta siempre y sin embargo he suplicado, quédate siempre a mi lado los dos juntos, CONTRA EL RESTO DEL MUNDO. Yo que ensayé mi discurso y de memoria lo sabía hoy frente a ti, me quedo en blanco y las frases se me olvidan. Me miras y me terminas, me rindo cuando suspiras por ti, y otra vez me ganas, vuelve a engancharme tu risa me atrapas en tu camisa en ti, me pueden tus labios, me pueden tus labios. Y te quiero mío, profundamente mío, aunque sea en esta calle sin salida, siempre tan mio, intensamente mío, aunque sé que es una locura que nos lía ir los dos juntos por la vida CONTRA EL RESTO DEL MUNDO.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario